La campaña 2019/2020 transcurrió en un contexto muy complejo, que puso a prueba la capacidad de gestión, previsión y adaptación de todo el equipo desde varios frentes: productivos, comerciales y estratégicos.
La campaña agrícola 19/20 cierra con excelentes resultados, en más de un aspecto. La renta obtenida fue del 68% y supimos afrontar los diversos desafíos que se presentaron a nivel productivo, climático y comercial, con un acertado manejo estratégico.
En el terreno productivo, logramos superar los vaivenes climáticos con decisiones ágiles y la dedicación de un excelente equipo de trabajo, sumado a las lluvias oportunas. Esto nos permitió obtener rendimientos superiores a los estimados.
En cuanto al mercado, supimos adelantarnos a las medidas locales y las acertadas estrategias de comercialización nos permitieron minimizar el impacto de las retenciones. Cuando creíamos haber salido de las aguas turbulentas, llegó la crisis internacional COVID-19 y sus consecuencias en nuestra economía local. El movimiento del dólar, con la complejidad del desdoblamiento y el retraso del tipo de cambio oficial, fue un factor clave que requirió seguimiento constante y análisis al detalle para tomar las mejores decisiones. Una vez más, la cautela, la previsión estratégica y la experiencia fueron los pilares para lograr este cierre de campaña exitoso.
Por su parte, la campaña ganadera arroja resultados de 45% de renta, luego de haber atravesado etapas muy diversas, que también han puesto a prueba la capacidad de gestión, previsión y adaptación de todo el equipo. Si bien, en términos estrictamente financieros y de corto plazo, el número no supera el índice de inflación, siempre es importante analizar la inversión ganadera en términos productivos y de mediano plazo: obtuvimos excelentes promedios de ganancia de kg. y cerramos la campaña capitalizados con un rodeo de 1084 cabezas en excelentes condiciones.
En cuanto al mercado, nos dio una gran satisfacción durante el final de 2019, con récord de exportaciones y subas de precios, marcando un rumbo próspero para la ganadería argentina. Unos meses después, la crisis COVID-19 golpeó al mercado internacional e impactó localmente desde diversos frentes, produciendo nuevamente un retraso de precios, que se ve reflejado en los resultados de la campaña.
Mientras tanto, durante el año hemos dado respuestas a los vaivenes con decisiones estratégicas, aprovechando la flexibilidad que brinda el negocio. Se han pausado y retomado las terminaciones en feedlot para obtener los mejores márgenes, se han realizado compras y ventas sólo en las épocas más convenientes y también contamos con la posibilidad de elegir si abastecer al mercado interno o entregar carne para exportación.
Por último, estamos muy orgullosos de informar que este año más del 95% de los inversores han decidido mantener o aumentar su inversión en el Fideicomiso GestionAr. Estamos muy agradecidos por el voto de confianza que esto significa y nos alienta a redoblar nuestro desafío, en estos tiempos difíciles: cuidarnos entre todos y mantener firme la visión de trabajar cada día en la producción agropecuaria rentable y sustentable, generando trabajo y produciendo alimentos para nuestro país y para el mundo.