Estimamos obtener una rentabilidad del 65% en agricultura y de 58% en ganadería, lo que sería equivalente a una ganancia del 25% en dólares en la inversión en granos y un 20% en moneda dura para el ganado.
La campaña 21/22 presentó escenarios complejos e impredecibles, a la pandemia COVID-19 se sumó el conflicto bélico Rusia-Ucrania, movilizando los mercados de commodities con alzas pronunciadas y, al mismo tiempo, impactando en los precios y disponibilidad de insumos como el gasoil y fertilizantes, lo que produjo un aumento significativo en los costos de cosecha.
En ganadería también se registraron importantes subas en la hacienda, aún frente a las restricciones planteadas por el gobierno y al clima de incertidumbre internacional.
Con respecto a la situación local, la inflación sigue siendo el principal enemigo. Alcanzarla o superarla con instrumentos de inversión en plazos acotados, es un objetivo muy difícil de lograr. Por eso nos da una gran satisfacción la perspectiva de que los resultados del Fideicomiso GestionAr I nos permitan mantener el valor del dinero.
En cuanto al clima, ha sido un año particular que presentó buenas lluvias y eventos extremos en la zona agrícola, y períodos de escasez de agua en los campos ganaderos. Mientras que los rendimientos productivos agrícolas han sido buenos, en el norte hubo menor disponibilidad de pasto para los animales y como consecuencia, se ganaron menos kg promedio que los proyectados.
Si bien faltan aún dos meses para que finalice la campaña, podemos decir que las proyecciones son favorables en ambos negocios. Continuaremos trabajando con la misma dedicación y profesionalismo de siempre, atentos a cada detalle para seguir superando objetivos.
Agradecemos a nuestros inversores por confiar en GestionAr, en el campo argentino y en la capacidad de seguir alimentando al mundo.